FUEGO DE DESEO (90)
Un vestido
con flores para una cita contigo, con la piel erizada, pulso acelerado, llego
al paso que en instantes me coloco ante ti, tu mirada fijada suspira sin dejar
de asombrarse.
Tú eres mi
obsesión, creaste el imperio del exceso, entre mis piernas un obseso del deseo,
dominas grandes cimas entre monte Venus con la línea alba.
Marcas el
terreno, atas mis manos y dejando correr con ése cubito frio de hielo cada zona
esmerada, especialista en sexualidad avanzada.
Crispas tu
lengua en mis puntos cardinales, boqueas, noqueas mis piernas, me encaras hacia
el éxtasis con mucho énfasis.
Tortuosos y
lengüeteados besos que profundizan con ahínco mi subterfugio de una garganta ya
creída olvidada, despiertas en mi la furia del fuego y del dragón que llevo
dentro.

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